Después de intensos combates que se prolongaron durante tres meses, Israel ha declarado la completa eliminación de la brigada de Hamas en la ciudad de Rafah, ubicada en la Franja de Gaza. Esta victoria marca un punto culminante en la operación militar israelí, que ha sido descrita como una de las más arduas y prolongadas en la reciente historia del conflicto entre Israel y Hamas.
Desde que comenzaron los enfrentamientos en Rafah, Israel ha llevado a cabo una campaña militar sostenida con el objetivo de desmantelar la infraestructura militar de Hamas en esta ciudad estratégica. Rafah, conocida por ser un bastión de Hamas en el sur de Gaza, ha sido el escenario de combates intensos, donde ambas partes han sufrido bajas significativas. Durante estos meses, las fuerzas israelíes se enfrentaron a una feroz resistencia, ya que Hamas utilizó túneles, bombas trampa y tácticas guerrilleras para intentar frenar el avance israelí.
La operación en Rafah ha tenido un impacto devastador en la población civil de la zona. Según informes de organizaciones humanitarias, miles de personas han sido desplazadas debido a los intensos bombardeos y combates. La infraestructura de la ciudad ha quedado gravemente dañada, lo que ha exacerbado la crisis humanitaria en Gaza, un territorio ya afectado por años de bloqueo y conflicto.
La comunidad internacional ha expresado su preocupación por las consecuencias humanitarias de la operación, mientras que algunos países han instado a ambas partes a buscar una solución negociada al conflicto. Sin embargo, Israel ha defendido su derecho a la autodefensa, argumentando que la operación era necesaria para eliminar la amenaza que representaba Hamas en Rafah.
Con la eliminación de la brigada de Hamas en Rafah, Israel ha logrado un importante triunfo militar, pero el conflicto está lejos de resolverse. Hamas sigue siendo una fuerza poderosa en Gaza, y la tensión en la región permanece alta. La victoria en Rafah podría dar a Israel una posición de ventaja en futuras negociaciones, pero también es probable que genere nuevas olas de violencia si Hamas decide lanzar represalias.