Al recibir a tres ciudadanos estadounidenses liberados que estaban presos en Rusia, el presidente estadounidense subió confundido a un avión que acababa de aterrizar.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, recibió a tres ciudadanos de su país que se encontraban presos en Rusia, como parte de un acuerdo con Vladímir Putin de liberación de rehenes.
Así, llegaron en la madrugada de este viernes a Texas para ser sometidos a una revisión médica y psicológica en un centro militar, pero primero tocaron suelo estadounidense en la Base Aérea Andrews, a las afueras de Washington. Allí fueron recibidos por Biden, la vicepresidenta, Kamala Harris, y sus familiares.
Una vez los rehenes descendieron del avión, Biden subió las escaleras y entró a la aeronave, donde permaneció cerca de dos minutos. Desde afuera, Harris se quedó esperándolo, atónita por la situación, según se pudo ver en el video compartido en redes sociales.
“[Biden] legítimamente no tiene idea de dónde está o qué hace”, criticó un usuario de X (antes Twitter).
Luego del episodio, el exinfante de marina Paul Whelan y los periodistas Evan Gershkovich y Alsu Kurmasheva —los tres ciudadanos estadounidenses liberados en Rusia— abordaron otro vuelo hasta San Antonio (Texas) para ingresar en el Centro Médico Militar Brooke, donde los tres accedieron a ser sometidos a un programa llamado PISA (actividades de apoyo posaislamiento).
Como parte del canje de prisioneros, 16 personas fueron liberadas de cárceles de Rusia y ocho fueron excarceladas de Estados Unidos, Alemania, Polonia, Eslovenia y Noruega.